"Los valores como formadores de la identidad humana"

22.10.2008 13:09

Por Ronald Feo

En la antigüedad Platón  y en la edad media los padres de la iglesia, llegaron a la idea de identidad, entre lo bello, lo bueno y lo verdadero, dando al no ser y a lo negativo, carencia de valor. Pero la reflexión  de la edad moderna  dirigida por Nietzsche sustituyó la mediación sobre el ser por la investigación del conocimiento, no siendo considerado actualmente como una  actitud filosófica, como el producto de una determinada forma de vida, y por lo tanto recobrando su independencia ideal pero existente.

El valor posee cinco aspectos primordiales, la objetividad, la dependencia, la polaridad, la  cualidad  y la  jerarquía. Los valores humanos son positivos como la bondad, la belleza, la justicia, la verdad y la  salud, sin embargo poseen un valor antagónico, que viene a ser su contrario o antitesis, llamado también contravalor, como la maldad, la hipocresía, la injusticia, la envidia y la mentira. Siendo considerados, los primeros, estimables y los segundos despreciables.

Ríos, (2000) plantea una esfera de valores, contándose entre ellos los económicos (riqueza, poder), vitales (salud, enfermedad), lógicos (verdaderos, falso), estéticos (belleza, fealdad), éticos (bueno, malo), religiosos (santo, hereje). Existen además grados de valoración: más hermoso, menos respetable, buenísimo, entre otros. Por  consiguiente, los valores pueden ser desarrollados y expresados por el hombre ya que la mayoría de las veces estos valores  están ocultos o no intentan descubrirlo en su ser interior. Es así,  que cuando no se los intenta hallar o no se les enseña, el hombre cae victima  de sus propias pasiones, ambiciones, inventando excusas para justificar sus equivocaciones, esforzándose por  hacer prevalecer su injusta justicia, cegado por la obsesión de sus pensamientos que lo limitan y que no le permiten pensar correctamente y ver su realidad. Por esta razón, desde el punto de vista socio educativo, los valores son considerados referentes, pautas o abstracciones que orientan el comportamiento humano hacia la transformación social y la realización de la persona. Son guías que dan determinada orientación a la conducta y a la vida de cada individuo y grupo social.

Finalmente,  ante tanta abundancia de antivalores, la solución está en la siembra de valores, se debe interferir  ante todo lo que reduce al hombre a una dimensión mucho menor de la que realmente tiene “Ser humano”. Es un proceso largo del que quizás no veamos el final, pero que ennoblece a aquellos que están dispuestos a llevarlo a cabo.

Reflexión a partir de una conversación por correo electrónico, gracias día a día mejoramos si nos permitimos creer que puede ser así...

 

 

 

 

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